La dirigencia de Unión quedó en el centro de la escena institucional tras la notificación de un embargo judicial derivado de un fallo a favor del representante Sergio Levinton, en la disputa por el pase de Ignacio Malcorra a Tijuana (México). El reclamo, que se dilató por diez años en la Justicia, habría motivado la medida cautelar sobre activos del club; si bien no hay confirmación oficial, se habla de un monto cercano a 375.000 dólares. La institución anunció que presentará apelación.
En ese marco, el presidente rojiblanco Luis Spahn se expresó con dureza y defendió la actuación de la comisión directiva. Sus definiciones, textuales y contundentes, marcan el tono de la interna institucional en un momento económico complejo para el club: “Lo sabía perfectamente y el fallo nos sorprendió de sobremanera. Él tenía una copropiedad y empieza a disfrutar de los derechos que son de un jugador. Entonces, cuando dos personas son dueñas de una casa, le corresponde a cada una el 50%. Nosotros no teníamos ningún acuerdo con Levinton. Vendimos nuestro 50%”.
Spahn subrayó su disconformidad con la vía utilizada por el representante y cuestionó el alcance jurídico del fallo: “A raíz del fallo vino el embargo. Disconformes contra el fallo, porque va contra el Código Civil. Hizo este reclamo en la justicia civil y no en AFA, porque no tenía razón”.
Con firmeza institucional, el presidente defendió el mandato que recibió de los socios: “Voy a ser claro. Los socios nos eligieron para administrar y cuidar los derechos de los socios. En este caso, no vamos a ceder ni un centavo”.
Spahn admitió la incomodidad financiera que significa la medida y detalló que la dirigencia intentará agotar la vía judicial: “Vamos a esperar ahora la apelación, sin holgura financiera, con una primera parte donde vendimos pocos, rechazando incluso ofrecimientos para defender los intereses del club. Buscaremos soluciones y es ingrato que nos congelen el dinero. Veremos la solución que podemos tener”.
El presidente además cuestionó con dureza al representante: “No tenemos ningún vínculo con él. Ningún pacto. Es un mercader de necesidades y miserias humanas”. Sobre la negociación previa, Spahn agregó: “Trató de cobrar de las buenas, pero igual no se le iba a pagar, porque desconocemos el reclamo”.
Cerró apuntando a una supuesta incompatibilidad con normativa internacional: “Para ser honestos, esto está prohibido por la FIFA”.
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Ezequiel Cañete se irá libre: «Lamentablemente es un jugador al que las lesiones lo acompañaron y que también salió en busca de minutos. Hoy no está en la consideración del entrenador. Lo lamentamos mucho».
Jerónimo Dómina: «Podemos tener para fin de mes alguna resolución. Están abiertas las puertas para que no perjudique al club. No hay una solución intermedia. No creo que la relación con su representante sea superior al vinculo que tuvo el club desde su formación. Es posible que haya firmado un precontrato, pero no creo».
Fuente: LT10
