Este martes, trascendió que Brian Fernández no estaría pasando por su mejor momento. En Radio Gol 96.7 informaron respecto a la situación del delantero sabalero que habría faltado a algunos entrenamientos que se realizan vía Zoom y que además era muy difícil poder comunicarse con el jugador. Y que el único que pudo hacerlo fue Eduardo Domínguez. Se dice que estaría afrontando una etapa complicada en su tratamiento y eso sin dudas encendió las alarmas en el mundo Colón. Se habría apartado de algunos profesionales con los que veía llevando desde el inicio el acompañamiento terapeútico, para contratar por su cuenta a otros. Aunque en este momento, habría prescindido de la compañía de los profesionales. El delantero está en Desvío Arijón junto a su familia, aunque dicen que habría estado en barrio Yapeyú.
Precisamente en el inicio de la cuarentena, Fernández convivió con el cuerpo técnico de Colón en el Hotel de Campo, dejando una grata impresión por su predisposición al trabajo. Pero luego decidió retornar con su familia y en varias ocasiones a través de las redes sociales mostró cómo se entrenaba. Respecto a lo hecho en el el predio, el preparador físico Pablo Santella aseguró: “Era una especie de Gran Hermano en la pensión del club. Un día cocinaba uno y otro día cocinaba otro. Brian se entrenaba y lo utilizábamos como espejo para filmarlo y pasarlo al resto de los compañeros para que se entrenaran desde su casa. Fue muy satisfactorio verlo a él contento, entrenando como él quería”.
Pero esa realidad, parece haberse modificado en los últimos tiempos. De allí la preocupación que surgió en la dirigencia y en el cuerpo técnico. Por ello, esperan cuanto antes la vuelta a los entrenamientos, aunque sea en pequeños grupos para tener un contacto más cercano con el jugador. Sin dudas que este parate, le jugó en contra y encendió las alarmas en Colón.
Fuente: UNO Santa Fe
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