El exentrenador de Colón, Rodolfo De Paoli, volvió a recordar su paso por el Sabalero en una charla con Juan Pablo Varsky en su streaming Clanc. El DT, que asumió en reemplazo de Iván Delfino en la Primera Nacional 2024, apenas duró poco más de un mes en el cargo y luego fue sucedido por Diego Osella.
Con la distancia del tiempo, De Paoli se refirió a aquella etapa y describió el clima que encontró en Santa Fe: “Entre octubre y septiembre, 36 días. 36 días. Sí, bueno, pero ahí son los momentos que a veces tenés que saber elegir y cuándo entrar y cuándo salir. Es el diablo que vengan a buscarte de Colón y te digan: ‘Vení que Colón quiere ascender y de los últimos 11 partidos ganó uno solo’. Yo llegué y en los primeros cuatro ya habíamos ganado dos. Sin embargo, era una caldera. Había un microclima muy tenso.”
El entrenador reconoció que se encontró con un club atravesado por conflictos internos que excedían lo futbolístico: “Jamás me imaginé que había tanta atmósfera política. Era una locura. Pobre los jugadores que pasaron, los técnicos que pasaron. Atrás mío estuvo Osella, que había sido campeón, después Minella como interino, luego Pereira, más tarde Medrán. Todos con la misma suerte. Es una locura Colón. Lamentablemente el tiempo pone las cosas en su lugar.”
En ese sentido, De Paoli remarcó la magnitud de Colón y la presión constante del entorno: “Era un club muy grande, muy popular, campeón hace poco, jugando copas internacionales y de golpe estaba en la B Nacional. No se ponían de acuerdo entre ellos, la prensa es muy fuerte, la hinchada es enorme. A nivel local era como dirigir a Boca o River: salías a la esquina y ya sabían todo. Había drones en los entrenamientos. Era tremendo.”
De todas formas, también rescató aspectos positivos de su paso por Santa Fe: “Fue una gran experiencia. Conocí a tipos como Paolo Goltz, Sebastián Prediger, Javier Toledo, Bernardi. Ellos fueron los que más me respaldaron. Imaginate lo fuerte que era ese microclima que ni tipos con esa espalda pudieron sostenerlo. Después muchos de ellos terminaron dejando el fútbol. Era un desastre, el microclima era un desastre.”
El testimonio de De Paoli refleja la inestabilidad institucional y deportiva que Colón atravesó desde su regreso a la Primera Nacional, con una seguidilla de entrenadores que no lograron consolidarse en el banco y una presión constante que se hizo sentir en el vestuario.
Fuente: LT10