El pasado fin de semana, Tomás Paredes, arquero de Colón, disputó ante Estudiantes (BA) su segundo partido como titular con la camiseta rojinegra y tuvo una actuación más que aceptable. Ante la falta de resultados, el entrenador Ezequiel Medrán apostó por un equipo con varios juveniles dentro del once inicial para enfrentar al conjunto de Caseros. En diálogo con Sol Play, el futbolista surgido de las divisiones inferiores Sabaleras habló sobre el presente que le toca vivir dentro del plantel, las expectativas de cara al próximo año e intimidades referidas a su vida personal.
“Las sensaciones son raras. Estoy disfrutando la posibilidad de atajar pero con ese gusto amargo de no haber hecho una buena campaña y no cumplir el objetivo”, comenzó explicando. En relación a los dos partidos que le tocó disputar hasta el momento, ante Gimnasia de Mendoza y Estudiantes de Caseros, destacó: “La bronca del debut con Gimnasia fue que me patearon tres veces al arco y dos fueron goles. El sábado fue distinto. Traté de hacer lo mejor y estar para mis compañeros cuando me necesiten. Creo que hicimos un gran segundo tiempo y merecimos llevarnos el empate”, remarcó Paredes.
“Todos los equipos que nos han ganado tienen sus virtudes. Creo que la suerte también va de la mano con eso, pero el trabajo es clave”, reflexionó, respecto al rendimiento de Colón a lo largo del año. “Me centro en dar una buena imagen de cara al año que viene para tratar de competir con quien tenga adelante. Medrán dice que esté tranquilo, me dio consejos y hemos hablado bastante“, comentó.
Su relación con Marcos Díaz, Tomás Giménez y los juveniles
“Siempre tuve la suerte de estar acompañado de gente grande que me marcó mucho. De Marcos (Díaz) y Tomi (Giménez) aprendí un montón. Me llevo dos grandes amigos, más que compañeros, por como fueron conmigo“, confesó el arquero Sabalero, sobre la relación con sus dos colegas dentro del plantel profesional. “Generamos un grupo hermoso que siempre tiró para adelante y estuvimos todos juntos. El ambiente es duro, pero tratamos de pasarla bien y generar un buen clima laboral. Lo que pasó ya está, no se puede revertir“, manifestó. Sobre el vínculo con quienes fueron sus compañeros en Reserva y Liga Santafesina, Paredes valoró que trata siempre de “remarcarles lo que a mi me enseñaron para mejorar y ayudarlos. Yo soy uno de ellos más allá de que tenga la posibilidad de ser titular”, expresó.
Al ser consultado sobre el día a día en su vida cotidiana, el joven de 21 años contó que se levanta temprano para llevar a su padre al trabajo, para luego continuar con los entrenamientos. De momento, el estudio no está dentro de sus posibilidades, pero confesó que le gustaría poder hacerlo en algún momento. “Tengo ganas de seguir algo relacionado con contabilidad”, mencionó. “Mi papá es una persona increíble para mí y lo es todo al igual que mi mamá. Ellos hicieron de todo para que yo esté acá: desde quedarse sin comer una noche hasta endeudarse hasta la cabeza para que yo pueda cumplir mis sueños. Eso me llena de orgullo”, manifestó. Además, confesó que, junto a su pareja, están aguardando con ansiedad por el nacimiento de su primera hija.
A modo de cierre, y pensando en su futuro en Colón, Paredes aseguró convencido: “Voy a llegar preparado, mucho mejor de lo que estoy ahora, y el año que viene voy a hacerme mi lugar. Competiré palo a palo con el que venga“, sentenció.
Fuente: FM Sol
