La reunión convocada para este sábado por la dirigencia de Colón para consensuar la fecha de elecciones y exponer detalles de la situación deportiva e institucional, dejó un dato que no pasó inadvertido: la ausencia de Gustavo Ingaramo, ex candidato oficialista y hombre cercano a la gestión de José Vignatti. Si bien su faltazo no sorprendió a los presentes, generó comentarios y cuestionamientos en torno a su rol y al silencio sobre temas que hoy afectan directamente al club. Uno de los puntos más sensibles es el caso de Alberto Espínola, que derivó en un fallo del TAS contra Colón y la obligación de pagar cerca de 400.000 dólares, consecuencia de decisiones tomadas durante la anterior comisión directiva.
Las voces de los referentes opositores fueron elocuentes al término del cónclave sabalero. Ricardo Magdalena señaló: “No sorprense que Ingaramo no haya venido. Bicho (Godano) dijo que confirmó su presencia y lo esperamos hasta las 10.30. Ya se lo conoce que siempre llega tarde, pero se sabía que no iba a venir». Por su parte, Ricardo Luciani fue más allá y apuntó directamente contra Ingaramo: “Quería justo consultarle si tenía certezas de por qué pasó. Yo pensaba decirle que colaboren y paguen el tema de Espínola, porque lo generó la gestión anterior”.
En tanto, Gustavo Abraham también se mostró crítico: “Ingaramo responde al sector de Vignatti y no me sorprende que no haya estado. Nunca apareció. Está en la política de cubrir. No iba a querer dar respuestas y por eso no vino”. La ausencia de Ingaramo, sumada al reclamo económico que complica el presente del club, reavivó tensiones políticas en un momento donde lo que se reclama es unidad. Con las elecciones fijadas para el 30 de noviembre, el desafío será no solo ordenar el rumbo deportivo, sino también afrontar de manera conjunta una deuda que amenaza con condicionar el futuro inmediato de Colón.
Fuente: UNO Santa Fe